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Diagrama de Pareto: Centrando los Esfuerzos en lo Fundamental

por | 26-01-2012 | Herramientas de la Calidad, Las Siete Herramientas Básicas

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El Diagrama de Pareto constituye un sencillo y gráfico método de análisis que permite discriminar entre las causas más importantes de un problema (los pocos y vitales), y las que lo son menos (los muchos y triviales).

La relación 80/20 se ha encontrado en distintos campos. Por ejemplo, el 80% de los problemas de una organización son debidos a un 20% de las causas posibles. El 80% de los defectos de un producto se debe al 20% de causas potenciales. El 80% del absentismo, es causado por un 20% de empleados…

Evidentemente, la relación no debe ser exactamente 80/20. Pero sí se puede aventurar que unas pocas causas son responsables de la mayor parte de los problemas.

Ventajas

  • Permite centrarse en los aspectos cuya mejora tendrán más impacto, optimizando por tanto los esfuerzos.
  • Proporciona una visión sencilla y rápida de la importancia relativa de los problemas.
  • Ayuda a evitar que empeoren algunas causas al tratar de solucionar otras menos significativas.
  • Su visión gráfica del análisis es fácil de comprender y estimula al equipo para continuar con la mejora.

Utilidades

  • Determinar cuál es la causa clave de un problema, separándolas de otras presentes, pero menos importantes.
  • Decidir cuál será el objetivo de las acciones de mejora, optimizando la eficiencia de los esfuerzos llevados a cabo para ello.
  • Contrastar la efectividad de las mejoras obtenidas, comparando sucesivos diagramas obtenidos en momentos diferentes.
  • Puede ser utilizado tanto para investigar efectos, como analizar causas.
  • Comunicar fácilmente a otros miembros de la organización las conclusiones sobre causas, efectos y coste de los errores.

Origen del Diagrama de Pareto

En 1909 el economista y sociólogo Vilfredo Pareto (1848 – 1923) publicó los resultados de sus estudios sobre la distribución de la riqueza, observando que el 80% de la misma se encontraba concentrada en el 20% de la población.

A finales de los años 30, durante una visita a la central de General Motors Corporation para el intercambio de buenas prácticas de ingeniería industrial, Juran tuvo la oportunidad de conocer los trabajos de Pareto sobre la distribución de la riqueza.

Y ya más adelante Juran, mientras preparaba la primera edición de su obra Manual de Control de la Calidad [1], se vio ante la necesidad de dar un nombre corto al principio de “los pocos vitales y los muchos triviales”. Bajo el título “La mala distribución de las pérdidas de calidad”, en el que figuraban numerosos ejemplos de mala distribución, señaló que Pareto había encontrado mal distribuida la riqueza.

Asimismo, mostró ejemplos de curvas acumulativas para la desigual distribución de la riqueza y la desigual distribución de las pérdidas de calidad. Tituló esas curvas como principio de Pareto de la distribución desigual aplicado a la distribución de la riqueza y la distribución de las pérdidas de calidad.

El Principio de No – Pareto

Tal y como tituló Juran a su artículo, dio a entender, de forma involuntaria, que el principio de los “pocos vitales” con carácter universal fue formulado por Pareto. Así, y como reconoció el mismo Juran en The Non-Pareto Principle: Mea Culpa [2], esta implicación es errónea.

La primera exposición del principio como universal corresponde al propio Juran, no a Pareto. También reconoce que, si lo hubiera expuesto de otro modo, seguramente se habría denominado principio de Juran. Consecuentemente, hoy se denominaría diagrama de Juran, en lugar de diagrama de Pareto. Sin embargo, Juran tenía necesidad de una denominación abreviada, y no tuvo reparos aplicar el nombre de principio de Pareto.

Un apunte más. Incluso las curvas acumulativas características del diagrama de Pareto, no se deben a él, sino al economista norteamericano Max Otto Lorenz (1905). Éste dedujo la curva de Lorenz: una medida de la desigualdad en los ingresos de una sociedad.

Como importante aplicación del Principio de Juran (o de Pareto), está en el diseño de programas de mejora de la Calidad. Una acción de mejora deberá tener como objetivo a los pocos vitales.

Elaboración del Diagrama de Pareto

Los pasos a seguir para la elaboración de un diagrama de Pareto son los siguientes:

1. Seleccionar los datos.

Aquellos que se van a analizar. También el periodo de tiempo al que se refieren dichos datos.

2. Agrupar los datos.

Se agrupan según categorías, de acuerdo con un criterio determinado.

3. Tabular los datos.

Comenzando por la categoría que contenga más elementos y, siguiendo en orden descendente, calcular las frecuencias:

  • Absoluta.
  • Absoluta acumulada.
  • Relativa unitaria.
  • Relativa acumulada.
N.ºCATEGORÍAFrecuencia absolutaFrecuencia absoluta acumuladaFrecuencia relativa unitaria %Frecuencia relativa acumulada
1Reponer papel565630,6030,60
2Requiere limpieza359119,1349,73
3Falta tóner2511613,6663,39
4Papel atascado2313912,5775,96
5Máquina averiada1915810,3886,34
6Reponer tóner161748,7495,08
7Apoyo técnico91834,92100,00

4. Dibujar el diagrama de Pareto.

Ahora, se delinea el diagrama, sus ejes de ordenadas y abscisas. 

5. Representar el gráfico de barras.

En esta representación, el eje horizontal aparecerá también en orden descendente.

6. Delinear la curva acumulativa.

Se dibuja un punto que represente el total de cada categoría. Tras la conexión de estos puntos se formará una línea poligonal.

7. Identificar el diagrama.

Se etiquetan los datos como: título, fecha de realización, periodo estudiado, …

8. Analizar el diagrama de Pareto.

Finalmente, se analiza el diagrama de Pareto.

Diagrama de Pareto - curva

En el diagrama de Pareto anterior puede observarse como dos tipos de incidencias comprenden el 49,73% de los requerimientos de asistencia: Reponer papel (30,60%) y Requiere limpieza (19,13%).

Para conocer mejor el procedimiento de elaboración del diagrama, lea este artículo.


Notas

[1] Juran, J. M; Gryna, M. F: Manual de Control de Calidad. Madrid: McGraw-Hill, 1993.

[2] Juran, J:The non-pareto principle; Mea culpa.  Selected Papers nº 18, 1975.

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